“No fue un accidente, pero pudo serlo”, para el 80% de los conductores comerciales en México, esa es la frase que mejor describe su último año al volante. “Casi” tuvieron un percance por distracción, “casi” colisionaron, “casi” no lo cuentan. Y ese “casi” se repite en cada curva, semáforo y zona de carga del país.
Los datos son parte del reporte Detrás del volante: Conducción distraída en las operaciones físicas, elaborado por Samsara. El estudio encuestó a mil 550 operadores comerciales en siete países, incluyendo 150 en México, para entender a fondo por qué los conductores se distraen, qué consecuencias enfrentan y cómo revertir este patrón.
En México, el 83% de los conductores reconoció distraerse con su celular personal, y las actividades más comunes son hacer llamadas (33%), revisar redes sociales (29%) y enviar o leer mensajes (28%).
