Si bien existen los seguros que están vinculados a los créditos hipotecarios al comprar una casa, la gran mayoría de los mexicanos no cuenta con un seguro de vivienda por decisión propia.
Tan solo el 5.5% de los hogares en el país está asegurado y la mayoría de las pólizas se derivan de los contratos de los créditos hipotecarios, según la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).
Las cifras se relacionan con una escasa cultura de prevención. De acuerdo con una encuesta realizada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) en colaboración con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 28% de los encuestados no contratan seguros porque consideran que son caros.
Existen en el mercado diversos productos y condiciones que no resultan costosos. De acuerdo con cifras de 2022 de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), un seguro para casa habitación podría costar entre 3 mil a 9 mil pesos al año para una vivienda con un valor de 1.5 millones de pesos (mdp) que se encuentra en una zona de alto riesgo y actividad sísmica como la colonia Hipódromo Condesa.
Los precios pueden variar de una aseguradora a otra
Daniel Martínez, gerente de marketing y expansión de Creditaria México, dijo que asegurar una vivienda se vuelve una inversión primordial para evitar un desbalance en las finanzas cuando existe algún siniestro.
“Al tener una vivienda en una zona de alto riesgo como lo es nuestro país, donde la actividad sísmica es constante, tener un seguro de vivienda se convierte en un acto de responsabilidad y prevención que puede salvar a las personas de desembolsar cientos de miles de pesos o incluso perder el patrimonio que han construido en años. En el caso de los seguros en una hipoteca, la póliza puede variar de 5,000 a 10,000 pesos e incluso se puede pagar a meses sin intereses por lo que no resultan tan costosos”, indicó Martínez.
Fuente: realestatemarket.com.mx