La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) alertó sobre el riesgo de que se reduzcan los recursos para obra pública, ante la necesidad de realizar un ajuste fiscal a partir de 2025.
Propuso 10 mecanismos concretos para incrementar la inversión en infraestructura, con participación de los sectores público y privado, mediante esquemas financieros transparentes e innovadores.
En ese contexto, el presidente nacional de la CMIC, Luis Méndez Jaled, destacó que sin infraestructura no hay energía, agua, carreteras y conectividad. «Nadie quiere finanzas sanas con infraestructura enferma», sentenció.
«Sin infraestructura no hay nearshoring, ni crecimiento económico, ni calidad de vida para las personas. La infraestructura es un imperativo económico y un derecho humano», expresó el líder de los constructores del país.
Méndez Jaled enfatizó que en México y en el mundo no hay presupuesto público suficiente que, por sí solo, alcance para atender todas las necesidades de infraestructura, por lo que en otras latitudes se recurre a esquemas de participación público-privada, para aprovechar los diversos instrumentos de financiamiento a los que se puede acceder para las obras estratégicas.
Ante ello, dijo, la CMIC hace un llamado a las candidatas y el candidato presidencial a plantear en el debate no sólo el diagnóstico y prioridades de infraestructura, sino también, y sobre todo, los mecanismos concretos de cómo se va a financiar la infraestructura energética, carretera, portuaria, ferroviaria, hídrica, de salud, de educación, de telecomunicaciones y de movilidad urbana del país para los próximos años.
«En este tema no caben diferencias por colores políticos. Infraestructura es desarrollo. Infraestructura es bienestar y se trata de los derechos constitucionales de todas las personas», expresó el presidente nacional de la CMIC.