Tras llegar a un acuerdo el año pasado con las autoridades de Ciudad del Cabo para construir un complejo corporativo de Amazon invirtiendo más de 300 millones de dólares sobre unos 150 mil metros cuadrados.
Pero el proyecto fue detenido porque comunidades indígenas acusaron que el complejo se estaba construyendo en tierras sagradas, un lugar donde lucharon los antepasados africanos contra los primeros invasores coloniales; por lo que las demandas contra el proyecto, fueron escuchadas.
Según una publicación de The New York Times la jueza de la Suprema Corte de Western Cape ordenó que se detuviera la construcción al evidenciar que los desarrolladores no consultaron correctamente a la comunidad; así que el caso sigue abierto y los proyectos gerenciales de Amazon en África suspendidos.
Fuente: Money Brief